Hernia discal: Causas, síntomas y tratamiento
Descubre cómo aliviar el dolor, el entumecimiento y la debilidad del cuello, la espalda y las piernas con el tratamiento de Inicio de la hernia discal.
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Got chronic back pain? You may suspect a herniated disc as the culprit. Maybe a doctor told you that you have one after doing an MRI, or you strongly think it based on your back pain symptoms and a visit with Dr. Google.
So whether you’ve been diagnosed with a herniated disc or not, don’t feel like you’re stuck or doomed to a lifetime of pain. You don't have to be. Conservative at-home treatments, including targeted exercises can help you manage the pain and prevent or minimize future flare-ups.
Here, learn more about what a herniated disc is, how to prevent and treat it, and which exercises can help relieve your back pain, recommended by our Hinge Health physical therapists.
Nuestros expertos de Hinge Health
Steven Goostree, PT, DPT
Jonathan Lee, MD, MBA
Dylan Peterson, PT, DPT
Get pain relief for your back pain in minutes
¿Qué es una hernia discal?
Una hernia discal se produce cuando el centro de uno (o más) de los discos planos y redondos -que están situados entre las vértebras de la columna y actúan como amortiguadores, permitiendo que la columna sea flexible- empuja contra su anillo exterior. Esto a veces puede causar dolor de espalda o de cuello.
Si has oído a alguien referirse a una hernia discal como una protuberancia discal, los términos suelen utilizarse indistintamente, pero en realidad son médicamente diferentes. Con un disco abultado, el centro (core) gelatinoso no se sale de su anillo externo. Puede sobresalir un poco, pero no sale del anillo externo, que es lo que ocurre cuando se hernia un disco. Independientemente de la terminología, los síntomas y el tratamiento suelen ser los mismos.
Y he aquí otro concepto erróneo: Que todas las hernias discales causan dolor. No siempre es así. "Aunque una hernia discal puede contribuir al dolor lumbar crónico y empeorarlo, es probable que no sea la causa principal", dice Steve Goostree, PT, DPT, fisioterapeuta de Hinge Health. De hecho, las investigaciones demuestran que el 30% de las personas de 20 años y el 84% de las de 80sin dolor de espalda muestran signos de hernia discal en una resonancia magnética.
En otras palabras, como las hernias discales son fáciles de ver en las imágenes de tu espalda, es fácil suponer que son la causa de tu dolor de espalda. Pero puede darse el caso de que tengas hernias discales que no estén causando ningún síntoma, junto con otras razones por las que te molesta la espalda. ç
What Causes a Herniated Disc?
Here are common reasons you may experience a herniated disc:
Age-related changes in the spine. The most common cause of a herniated disc is natural, age-related changes in your spine. Over time, the discs in your spine start to shrink and become less flexible. This causes the spaces between your vertebrae to narrow.
An injury. As you get older, even a minor strain or twisting movement — for example, from lifting a heavy object — can cause a disc to herniate.
Genetics. Research shows that some families have a higher risk of developing herniated discs along their spine. It’s not clear why this happens.
Age and sex. Men between the ages of 20 and 50 are more likely to have disc herniation than other groups.
Symptoms of a Herniated Disc
Remember, herniated discs don’t always cause back pain. But if they do, you might experience the following:
Sharp or burning pain on one side of your body
Leg pain that spreads from your low back to your buttocks, thigh, calf, and possibly foot
Numbness or tingling
Muscle weakness that may cause you to stumble
If you’re prone to pain from a herniated disc, the pain may flare and subside on occasion. “It’s important to remember that a herniated disc in the lower back is no reason to panic,” says Dr. Goostree. “They do have a tendency to heal, so that you’re not burdened with them your whole life.” The herniation should naturally resolve over time and be reabsorbed by your body. In the meantime, you can use the treatments below to reduce pain while your back heals and reduce the chances of future pain flares.
Physical therapy (PT) is for more than just recovering from surgery or injury, it’s one of the top treatments for joint and muscle pain. It helps build strength, improve mobility, and reduces pain. And it doesn't always need to be in person.
Hinge Health members can conveniently access customized plans or chat with their care team at home or on the go — and experience an average 68% reduction in pain* within the first 12 weeks of their program. Learn more*.
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La información contenida en estos vídeos está destinada exclusivamente a fines educativos y no constituye consejo médico ni tratamiento para ninguna afección específica. Hinge Health no es tu proveedor de atención médica y no es responsable de ninguna lesión sufrida o exacerbada por tu uso o participación en estos ejercicios. Consulta a tu proveedor de atención médica sobre cualquier pregunta que puedas tener sobre tu afección o tratamiento médico.
Tratamiento de la hernia discal
La mayoría de las veces, una hernia discal mejora por sí misma al cabo de varios días o semanas. Pero puedes ayudar a acelerar el proceso con los siguientes consejos de nuestros fisioterapeutas y médicos de Hinge Health:
Ejercicios terapéuticos. La terapia de ejercicio puede ayudar a aliviar el dolor lumbar que puede estar relacionado con una hernia discal, sobre todo si prefieres hacer ejercicio con algo de apoyo. Un fisioterapeuta (fisioterapeuta) puede crear un plan de tratamiento personalizado que incluya ejercicios objetivo específicos para la hernia discal (como los anteriores) para fortalecer los músculos que sostienen la columna vertebral, mejorar la flexibilidad y la postura y reducir la presión sobre la hernia discal. Puedes ver a un fisioterapeuta en persona o usar un programa como Hinge Health para acceder a uno por medio de telesalud o una videoconsulta.
Medicamentos sin receta (OTC). Los analgésicos como el ibuprofeno (Advil, Motrin), el naproxeno (Aleve) y el paracetamol (Tylenol) pueden ser útiles para el dolor de espalda. Es importante que te asegures de que puedes tomar estos medicamentos con seguridad, de acuerdo con tu historial médico.
Medicamentos con receta. Los fármacos recetados habitualmente para las hernias discales son fármacos neuropáticos, que afectan a los impulsos nerviosos para disminuir el dolor. Entre ellos están la gabapentina (Neurontin), la pregabalina (Lyrica) y la duloxetina (Cymbalta). Algunos médicos recetan relajantes musculares si también tienes espasmos musculares, pero conllevan efectos secundarios como somnolencia y mareos.
Inyecciones de esteroides. Si los medicamentos sin receta y los tratamientos conservadores no alivian suficientemente el dolor, tu médico puede sugerirte inyecciones de esteroides con cortisona. Estos pueden aliviar el dolor de espalda y piernas reduciendo la inflamación cerca de las raíces nerviosas. "Es importante recordar que las inyecciones no curarán una hernia discal", explica el Dr. Goostree. "Solo ayudarán a reducir la inflamación que puede estar contribuyendo temporalmente al dolor".
Cirugía. La buena noticia es que alrededor del 90 % de las personas con hernia discal obtienen mejoría con los tratamientos anteriores y, por lo general, no es necesario practicar una cirugía. Sin embargo, puedes ser candidato a la cirugía si tu dolor no mejora con los tratamientos no invasivos y experimentas debilidad muscular, dificultad para caminar y pérdida de control de la vejiga o los intestinos. Habla con tu médico sobre si eres un buen candidato para la cirugía.
Cómo prevenir una hernia discal
Hay muchas cosas que puedes hacer para reducir las probabilidades de desarrollar una hernia discal. Entre ellas están:
Mantener un peso saludable. El exceso de peso corporal puede ejercer una tensión extra sobre los discos de la espalda baja.
Prepara tu cuerpo para levantar peso. Si tienes que levantar objetos pesados, es importante que practiques. El ejercicio y el movimiento pueden hacer que tus discos sean más gruesos y fuertes. Pero evita levantar drásticamente más peso del que estás acostumbrado o, cuando estés cansado. Pide ayuda o busca algún equipo que te ayude.
Mantente activo. Un estilo de vida sedentario hace más probable que acabes teniendo una hernia discal. Cuando tengas que estar sentado mucho tiempo, haz pausas frecuentes para moverte o estirarte. "También recomiendo a los pacientes que utilicen una almohada o un soporte detrás de la espalda cuando estén sentados", comenta el Dr. Goostree. Esto puede apoyar la curvatura natural de la columna y reducir la tensión en la espalda.
No fumes. La nicotina disminuye el flujo de sangre y oxígeno a tus discos vertebrales, lo que puede hacer que envejezcan más rápidamente.
Mantente hidratado. Los discos están formados principalmente por agua, por lo que la deshidratación puede hacerte más propenso a las hernias.
Consejo PT: Mantente activo
Está bien que te lo tomes con calma uno o dos días si te duele la espalda, dice el Dr. Goostree. Pero después, quieres volver a ponerte en marcha. De hecho, los investigadores del dolor afirman que es mejor permanecer en el trabajo o volver a él lo antes posible. Esto favorece la llegada de sangre y oxígeno a los tejidos para su curación, mantiene los músculos fuertes y ágiles y ayuda a reducir el dolor. Una vez que vuelvas a estar activo, evita estar sentado mucho tiempo.
Cómo puede ayudarlo Hinge Health
Si tienes dolor en las articulaciones o los músculos que dificulta el movimiento, puedes obtener el alivio que has estado buscando con el programa de terapia de ejercicio virtual de Hinge Health.
Lo mejor es: no tienes que salir de casa porque nuestro programa es digital. Eso significa que puedes obtener fácilmente la atención que necesitas a través de nuestra aplicación, cuándo y dónde te funcione a ti.
A través de nuestro programa, tendrás acceso a ejercicios terapéuticos y estiramientos para tu condición. Además, tendrás un equipo de cuidado personal que te guiará, apoyará y adaptará nuestro programa a tu medida.
Verifica si cumples con los requisitos de Hinge Health y confirma la cobertura gratuita a través de tu empleador o tu plan de beneficios, aquí.
Este artículo y su contenido se proporcionan únicamente con fines educativos e informativos y no constituyen asesoramiento médico ni servicios profesionales específicos para ti ni tu afección médica.
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